Empezó una tediosa campaña electoral en Alemania, con candidatos de los más pazguatos, proliferación de clichés en todos los partidos contendientes y apatía generalizada del electorado. Aunque los alemanes nunca se han distinguido por su colorido ni por ser precisamente de los más divertido (Katoffeln), en esta ocasión se están pasando de la raya. Las cosas están más de güeva que de costumbre. Tanto la actual canciller Merkel como el petardo candidato de los socialdemócratas están para llorar.
Antes al menos había personalidades de mayor talla intelectual y política. Pienso en Adenauer, Brandt, Schmidt, Strauss, Heuss, Scheel, todos ellos eran otra cosa, algunos intelectuales, otros carismáticos, todos estupendos políticos. Más tarde vino el dueto Kohl- Genscher, más de flojerita, pero que fueron capaces de reunificar al país. Más recientemente hubo otra pareja interesante, la de Schroeder-Fischer. Pero hoy tenemos a una regordeta de personalidad simplona, muy “bauerin” ella, Angela Merkel, que me recuerda a mi germanota ex mujer (y no es un halago, créanme). Esta señora gobierna al país por casualidad. Quien debería ser el actual gobernante germano, el ese sí destacado político Wolfgang Schäuble, cayó víctima de las travesuras del gigantón Kohl. Y no es que bauerin Merkel sea del todo una mala gobernante, de hecho ahí la ido llevando, pero la mujer tiene menos carisma que un ostión. No me gusta, que quieren.
Y de los socialdemócratas, ni hablar. Agonizan. Sólo en México un grupo de juniorcillos snobs se le ocurre llamarse Partido Social Demócrata. La cosa esta depasse, entiéndalo. ¿Existe aún una razón para votar al SPD?, se pregunta esta semana Der Spiegel. Ich glaube nicht.
Los que tienen un poco más de má chiste son, como siempre, los verdes y los demagogazos de Die Linke (la Izquierda), los primeros desde su aparición en la escena política alemana se han encargado de ponerle la sal y pimienta, pero ya sin el gran Joschka Fischer empiezan a declinar; los segundos tienen a Oskar Lafontaine, apodado por este Oso el “Muñoz Ledo alemán" por se un sujeto tan megalómano, oportunista, demagogo y mentiroso que su par mexicano (no sé si tan alcohólico). Eso sí, al menos tiene personalidad.¿Esperanza para el futuro? ¡Sí la hay! Y es simpático, inteligente y gay alcalde de Berlín Klaus Wowereit, mi “gallo rosa” para el 2013
2 comentarios:
jajaja la bauerin. Que malo, yo la quiero! Pero debo coincdir contigo, la campana es aburrida, más bien la pregunta es, Y la campana? porque no hay. el CDU juega a no dar pistas para que el SPD no pueda criticarle y entonces tenemos al grisón de Steiny gritando á la Schröder sin decir nada y a Merkel platicando del color de sus sacos. Bueno ni Die Linke da color.
El escándalo está en la ministra Schmidt que se llevó el "meche" a Alicante y se lo robaron. De ahí no salimos. y los que más salen en la tele son Westerwelle y zu Guttenberg que más que lo que tienen que decir, tienen unas corbatas preciosas.
Así que tu lo haz dicho, so laaaaaangweilig.
Lo que si es que creo que tu premonición de una Große K. II cada día la veo más difícil. La Socialdemocracia se pasó de la fecha de caducidad.... Veamos si Wowi la hace, buen gallo. Me gusta.
Klaus Wowereit es un PUnTo con muchas posibilidades de triunfar, mira lo que ha hecho por Berlin! volvieron a votar por el y se lo merece!
Merkel ridicula!, astringente petulancia burda con su escote apto para guacarear! que mal marketing!
El SPD, nada que ofrecer! que tiempos los de Shroeder, con el alfil Joshka Fischer y el gran Struck, esa si es una buena coalicion con los "realgruenen", que comparado con el partido mierde, perdon, verde mexicanos es como una alusion al blanco y el negro.
Bis Bald! mi querido Pedro, desde el Freistaat Bayern, tu amiga, Gabriela E.
Publicar un comentario