martes, 9 de marzo de 2010

Comparsa su chingada madre, Sr. Reyes Heroles Junior.


El día de hoy en el diario Reforma el opinador Federico Reyes Heroles publicó un artículo ofensivo, haciendo gala de tonito pedante y autoadulatorio que siempre le ha caracterizado a sus escritos, acusando a todos quienes criticamos las propuestas de reforma electoral -tanto las presidenciales como la del PRI y el PRD- de ser "comparsas del status quo de siempre". Quizá el hijo del insigne autor de El Liberalismo Mexicano no se ha enterado, pero muchos de quienes nos oponemos a las propuestas de reforma de la triada partidista lo hacemos preocupados porque buscan mantener cerrado al sistema de partidos, hecho que de suyo es gravísimo e implica una grave regresión en nuestro régimen representativo. Conocedor como, se supone, este pedante tan pomposo como engreído es de lo que sucede en el mundo, debería saber que no basta con candidaturas independientes y con reelección legislativa para contar con un sistema de partidos fuerte y representativo. En ninguna parte del mundo la legislación electoral impone tantas y tan injustas trabas a las organizaciones emergentes como en México. Ese, me parece a mí y a mucha gente especializada en el tema, es el problema de fondo. Pero Reyes H nos llama "comparsas" únicamente porque no estamos de acuerdo con él. ¡Qué vergüenza y que falta de mesura de quien se cree uno de los puntales del mundo intelectual mexicano!
En ninguna parte de su articulito de hoy veo que Reyes H se preocupe por comentar las objeciones de quienes exigimos abrir al sistema de partidos a nuevas expresiones políticas derogando las injustas condiciones actuales y de quienes estamos preocupados por las limitaciones que pretenden imponerse a la representación proporcional. Ojalá este señor fuera un poquito menos grandilocuente a la hora de aquilatar sus presuntas aportaciones al debate político mexicano y se tomara la molestia de entender cuáles son nuestras críticas, objeciones y propuestas y de comentarlas con seriedad.

Entiéndalo, ser Reyes Heroles junior: demandamos la apertura del sistema de partidos y el fin efectivo del oligopolio actual, y las propuestas del PAN , del PRI y, en buena medida, del PRD procuran exactamente lo contrario. Por eso son regresivas. Ustedes, con sus desplegados y sus firmas, apoyan un regresión en el sistema de partidos mexicano. ¿Cómo se atreve a decirnos a nosotros que estamos a favor del status quo de siempre simplemente porque nos atrevemos a no estar de acuerdo con los abajofirmantes?

viernes, 5 de marzo de 2010

Las inminentes elecciones británicas y sus lecciones para México y sus abajofirmantes.


Se acercan las elecciones en Gran Bretaña y para México estos comicios representan una oportunidad muy especial para comprobar como funcionan en la realidad ciertos mecanismos electorales que ahora mismo algunos (el gobierno de Calderón, para empezar) nos quieren vender como si se tratase de la última Coca Cola en el desierto. En concreto, me refiero a la reelección parlamentaria y a la guerra que se pretende declarar en contra del proporcionalismo. El Reino Unido tiene un añejo sistema electoral donde no existe representación proporcional y, por lo tanto, todos los miembros del parlamento son electos en distritos uninominales, lo cual, desde la óptica de nuestros frívolos adalides de la democracia "ciudadana" es ideal ya que permite, se supone, que exista una relación directa entre representantes y gobernados y, por lo tanto, los electores se ven en la posibilidad de aprobar o censurar con su voto la actuación del diputado de su distrito. Eso sencillamente es falso. Lo es en el caso del Reino Unido y lo es en el de otras naciones que carecen de representación proporcional (el de Estados Unidos es un ejemplo sui generis y difícilmente ejemplar, como lo hemos visto en otros post del Oso Bruno). Los electores asisten a las urnas no con el afán de "premiar" o "castigar" la labor de su representantes en concreto, sino para elegir al gobierno nacional. Encuestas más o menos recientes (2004) efectuadas en el Reino Unido demuestran que poco menos del 30% de los ciudadanos que asisten a las urnas sabe el nombre del representante de su distrito ante el Parlamento de Westminster, y que la abrumadora mayoría vota teniendo en mente quien será el próximo primer ministro y no como reacción a la forma particular en que el diputado del respectivo distrito se haya desempeñado en lo personal.

En mayo los británicos eligiran entre dos candidatos: Brown o Cameron, y quien afirme lo contario sencillamente no conoce al sistema político británico. Y si uno se asoma en el resto de las democracias europeas, latinoamericanas e incluso asiáticas la actitud del elector es practicamente idéntica: asiste a votar en los comicios generales sabiendo qué lo que está en juego es la formación de un gobierno nacional y por lo tanto vota antes por el partido que por el candidato, cuyo nombre incluso ignoran en la inmensa mayoría de las veces. Y si esto sucede en el Reino Unido y en naciones sin representación proporcional como Canadá, Chile, Francia y otros más, con mayor razón se experimenta en países donde priva l proporcionalismo como Brasil, Argentina, España y un largo etc.

Otra lección que deberían sacar los abajofirmantes del caso británico (si de verdad tiene algo de honestidad intelectual) es la apremiante necesidad que tiene el Reino Unido de adoptar esquemas de representación proporcional para lograr que las fuerzas políticas del país obtengan una bancada parlamentaria más afín a la votación que reciben en las urnas. Las demandas en este sentido son añejas e incluso ya fue aprobado en el Parlamento de Westminster un esquema de Voto Único Alternativo que podría funcionar en comicios futuros. Pero nuestros abajofirmantes creen que es muy democrático reducir los espacios a la representación proporcional. ¿Por qué no dejan de lado sus clichés y buenos deseos y se ponen a estudiar lo que pasa en el mundo real con las fórmulas que nos proponen? ¿Por qué no dejan por un rato a un lado el tonito melodramático y cursi con el que redactan sus desplegados y hacen uso de la famosa curiosidad intelectual para darle un repaso crítico a la historia electoral de las democracias modernas?

La realidad que los mexicanos debemos entender de los próximos comicios británicos es la siguiente: pronto habrá elecciones en Gran Brataña. Los electores irán a las urnas no para "premiar" o castigar" a su diputado, sino en la inteligencia de que decidirán entre Gordon Brown y David Cameron para ser primer ministro, entre laboristas o conservadores para definir al partido del gobierno, y lo harán haciendo uso de un deficiente sistema electoral que reduce injustamente la influencia política que deberían tener terceras fuerzas con destacada presencia nacional, como es el caso del Partido Liberal, a causa de no contar aún con ningún tipo de paliativo proporcional.
En el Reino Unido y sus maneras de elegir gobernante hay un par de lecciones para México. ¿Cuáles creen que sean, señores abajofirmantes?

martes, 2 de marzo de 2010

¡Jaime Bayly para presidente!


El Oso Bruno está feliz desde que se enteró que no de sus alter ego favoritos, el estupendo satirista, escritor y periodista peruano Jaime Bayly, se presentará como candidato a las elecciones presidenciales peruanas de 2011. Aunque muchos de los politiquillos profesionales se niegan a tomar en serio las pretenciones de este satirista, lo cierto es que será una estupenda oportunidad para evidenciar las múltimples miserias de la clase política peruana. Y ¡cuidado! en muy pocas semanas Bayly ya tiene un 6 por ciento de la intención de voto sólo en Lima y pasa el 3 por ciento en el resto del país, cifras bastante razonables a estas alturas, sobre todo si se recuerda que, por ejemplo, ALberto Fuimori empezó con menos y al final resultó electo (para desgracia de Perú, por cierto).

Claro, hay que reconocer que nuestro amigo rema contra corriente, cual debe de ser en un país tan profundamnete conservador como lo es Perú. Las propuestas económicas y sociales de este liberal irrestricto incluyen cosas como legalizar las drogas, despenalizar el aborto, permitir los matrimonios homosexuales, desaparecer a las Fuerzas Armadas en el Perú y eliminar las subvenciones económicas a la Iglesia Católica, son demasiado controvertidas para la derecha, mientras que la izquierda radical lo detesta por sus constantes críticas y burlas a los populistas latinoamericanos (en especial Chávez), mismas que no se cansa de erigir en su programa de televisión El Francotirador. Desde luego, en un país con políticos tan mediocres, la sola presencia de Bayly causa revuelo y ha recibido críticas de sus más probables oponentes, a los que el genial satitista ha dado puntual respuesta en su columna del diario Perú 21. He aquí algunas de sus respuestas




A Lourdes Flores, líder del Partido Popular Cristiano (PPC), quien señaló que la candidatura del periodista y escritor no debería tomarse en serio ya que "la gente busca encauzar su descontento con un personaje como él. Pero no siento que sea una propuesta válida", Bayly respondió de forma rápida e irónica: "El problema con Lourdes es que no ha tenido suerte en el amor. Yo le deseo suerte, pero ella lo que necesita no es ser presidenta del Perú, sino conseguir un buen esposo que le dé las satisfacciones que ella se merece". Además, apuntó que "la señorita debería aprender a usar mejor las palabras. Puede decir que mi candidatura no le gusta o le da miedo, pero la validez o invalidez no la decidirá ella, sino la autoridad electoral competente".

Por su parte, Ollanta Humala, el populista candidato de Hugo Chávez en las pasadas elecciones de 2006, dijo que "Jaime Bayly podría ser propuesta de un sector del poder económico" y que se buscaba con ello "dispersar el voto de la derecha(sic)"algo que el presentador del programa "El francotirador" respondió claramente: "Sabemos que es un mantenido, pero no sabemos el poder económico que lo mantiene. La diferencia entre usted y yo, señor Humala, es que yo vivo de mi trabajo y usted vive cómodamente de las propinas generosas de sus amigos. Por lo demás, es idiota suponer que el poder económico quiere dispersar el voto de la derecha".

Al ex presidente Alejandro Toledo también se le preguntó sobre la candidatura. A su modo de ver, "en democracia todos son libres de postular. Esperemos que sea una candidatura seria, porque luchar contra la pobreza que involucra a 12 millones de peruanos, esa lucha es un asunto serio, no es un asunto de chacota (broma), es un asunto de gran envergadura". Bayly, que atacó duramente a Toledo en la campaña electoral de 2001 cuando no reconoció en su momento a una hija, dijo que "es el mismo señor Toledo que se negó a reconocer a su propia hija. Es el mismo señor que se tomó a la chacota a su hija biológica".

Hasta el presidente Alan García opinó, aunque de manera más sensata, demostrando que aún tiene muy activos sus insuperables instintos políticos. "La veo (a la candidatura) con simpatía, porque ha puesto en el tapete una serie de temas que nadie pone y que sirven para que la gente piense, en los que se puede estar o no de acuerdo, pero es bueno que todos pensemos, como la relación con las religiones, el matrimonio entre homosexuales". Obviamente esta opinión de García ha sido la que más le ha gustado a Bayly. En El Francotirador agradeció las palabras presidenciales e incluso le pidió perdón por criticar su sobrepeso: "Le ofrezco mis disculpas a García. Él me ha dado una gran lección de lectura del debate. Que este gordo es problema suyo y de su esposa". Agregó que "como bien dice García, yo he planteado temas que otros candidatos no los tocan pero García, como buen político, no ha opinado si está de acuerdo o no con aquellos temas. Tampoco ha dicho si votará por mí, escudándose en el voto secreto, pero creo que le convendría que yo gane".

Desde esta humilde tribuna le deseamos mucha suerte a nuestro hermano satirista Jaime Bayly.

viernes, 26 de febrero de 2010

El adorable candor de Paco Calderón



PROYECTOS DE REFORMA POLÍTICA
Sucinto Análisis Comparativo

Propuestas incluidas por el PAN:
Reelección de alcaldes.
Reducción del número de legisladores electos por la vía proporcional
4% de la votación nacional como mínimo para el registro de partidos
Reducción del Congreso
Iniciativa ciudadana
Candidaturas independientes
Segunda vuelta en elección presidencial
Atribución a la SCJN para presentar iniciativas de ley
Iniciativa Preferente
Veto al presupuesto de egresos

Propuestas incluidas por el DIA
Totalidad de legisladores electos por la vía proporcional
Iniciativa Ciudadana
Candidaturas Independientes
Iniciativa Preferente
Veto al presupuesto de egresos
Revocación de mandato
Democracia directa
Autonomía del MP
Designación del Procurador por el Senado.

Propuestas incluidas por el PRI
Reelección de legisladores
Reducción del número de legisladores electos por la vía proporcional
Candidaturas independientes
Iniciativa Preferente
Ratificación parlamentaria del gabinete
Referéndum
Autonomía del Ministerio Público
Acotación del fuero
Moción de censura parlamentaria
Suplencia por falta del Presidente
Nuevo formato al Informe Presidencial
Declaración de Estado de Emergencia


Paco Calderón es un estupendo monero que casi siempre da en el clavo, pero ayer se voló la barda en lo que se refiere al candor y maniquísmo que, a veces, tienen sus cartones. Ver al PRI como el deleznable dinosaurio enemigo a vencer a toda costa me parecería muy bien si de verdad la opciones que tiene enfrente fueran, por lo menos, un poquito mejor. Está visto y comprobado que no lo son. Lo pero en lo que concierne a las propuestas de reforma política, tema del cartón de marras, paradójico resulta que la menos mala sea precisamente la del PRI, ya que no se limita a proponer reformas encaminadas a fortalecer el bipartidismo (aspecto sumamente negativo incluido en las ideas expuestas por el PRI y el PAN y que los abajofirmantes rehusan ver) sino que aborda el tema fundamental de las relaciones entre Ejecutivo y Legislativo que la pacota iniciativa gubernamental ignora por completo. Varias de las ideas del PRI son sumamente rescatables, como la moción de censura, la ratificación parlamentaria del gabinete, el cambio de formato del informe presidencial y la adopción de mecanismos de democracia directa. Las ideas del DIA no carecen de virtudes, en especial porque respetan el proporcionalismo. Por razones obvias (protección del actual oligopolio partidista)las tres omiten el tema esencial de lo que debería de ser una reforma de verdad democratizadora, más allá de visiones chatas y maniqueas: la apertura del sistema de partidos, con la promulgación de una ley especial en la materia que elimine las condiciones draconianas actualmente prevalecientes que cierran el paso a la participación de nuevas organizaciones en los procesos electorales y establezca un sistema de registro escalonado que elimine los onerosos (y ampliamente corruptores) financiamientos a priori a los partidos.

Después de leer las tres propuestas es muy difícil no pensar en la irresponsabilidad y precipitación de los abajofirmantes al entregarse tan candorosamente a la propuesta gubernamental, por mucho la peor y más incompleta de las tres. Las ganas de protagonismo y el amor a la pontificación llevó a nuestros presuntos intelectuales a una ridícula precipitación.

domingo, 21 de febrero de 2010

China, la potencia insatisfecha


El reciente enfriamiento en las relaciones entre China y Estados Unidos es reflejo de lo que muchos sinólogos han llamado el "síndrome de la potencia insatisfecha". El inmenso país asiático ha demostrado una enorme inmadurez en el manejo de sus relaciones y responsabilidades internacionales. Los líderes de Beijing se caracterizan en su actitud ante el mundo por el inmediatismo y una excesiva desconfianza hacia Occidente y poco cabe esperar de ellos actualmente en relación con el equilibrio mundial y el mantenimiento de la paz y seguridad internacionales.

Hasta hace poco prevalecía en Washington una visión optimista que sostenía que China, como efecto de su acelerado desarrollo económico y sus crecientes relaciones con el mundo capitalista, se iría convirtiendo en una sociedad desideologizada y pragmática capaz de liberalizar gradualmente su política y cultura y sería capaz de asumir de forma seria compromisos internacionales de gran calado. Quienes así opinan describen en China una potencia conservadora esencialmente interesada en mantener la estabilidad regional y concentrada en conseguir sus metas de crecimiento económico. Esta visión de China sostiene que su poderío militar es limitado en virtud del relativo atraso tecnológico de sus fuerzas armadas, y señala que, en general, la política exterior de Pekín ha sido y será por naturaleza “reactiva más que agresiva”. De acuerdo con esta lógica, Estados Unidos y sus aliados tienen razones más que suficientes para buscar establecer una política “de compromiso” con los dirigentes chinos para evitar que una China marginada se convierta en un problema mundial.

Pero en los últimos años se demuestra que quienes tenían una visión más pesimista sobre las aspiraciones internacionales de China estaban en lo correcto. China es una potencia emergente de casi 1,300 millones de habitantes, dueña de un vasto arsenal nuclear y que dedica inmensos recursos económicos anualmente a mejorar su capacidad militar. Dirigida por una gerontocracia totalitaria y ambiciosa que se sostiene en el poder gracias a un ejército chauvinista obsesionado en lavar humillaciones del pasado, China no descarta en absoluto establecer una indiscutible hegemonía en Asia y hacer valederas, a como de lugar, una serie de reclamaciones territoriales a costa de sus vecinos. Queda claro que China es la principal amenaza a la paz y seguridad internacionales y será inevitablemente el principal rival de Estados Unidos y sus aliados en el siglo XXI y es imprescindible que Estados Unidos emprenda una política de contención frente a China similar a la utilizada contra la Unión Soviética durante la guerra fría. Es decir, mantener perennemente una poderosa presencia militar en la zona, entablar una “carrera armamentista” con los chinos que le procure a Estados Unidos una considerable supremacía y no ceder ni un ápice en lo concerniente a la defensa de Taiwan.

Washington ha inetentado por todos los medios de establecer una política “de compromiso” con Pekín, seguro de la validez de la máxima que reza “trata a China como un enemigo y tendrás en China a un enemigo”. Pero la actitud china frente al gobierno de Obama demuestra que China ha sido incapaz de responder positivamente al aperturismo occidental y matiene como sus guías de conducta su tradicionales resquemores y desconfianzas. Este país no esta interesado por el momento en asumir las responsabilidades de una gran potencia mundial y si Estados Unidos no es capaz de ponerle un hasta aquí será causa de desequilibrios inmanejables y de graves enfrentamientos internacionales.

El principal factor que hace de China un país potencialmente desetabilizador reside en el hecho de que se trata de una potencia insatisfecha, y las causas de su insatisfacción son fundamentalmente difíciles de resolver. Desde luego, el caso de Taiwan es el más importante motivo de irritación para los líderes chinos. El objetivo fundamental de la política exterior de China es lograr la reunificación de esta “provincia rebelde”. Pero el problema de fondo es que en Taiwan es ya mayoritaria la población que nació en la isla y no se siente identificada ni con China continental ni con las fútiles aspiraciones de representar al “único gobierno legítimo” que hasta la fecha conserva la vieja clase política. Tarde o temprano un gobierno democráticamente electo manifiestará abiertamente el deseo de la isla de independizarse, y es previsible que China amenace seriamente con una intervención militar.

Asimismo, la obsesión china de contar con “fronteras seguras” está en el fondo de las disputas territoriales que sostiene este país con sus vecinos. China rechaza las reclamaciones japonesas sobre las islas Diaoyu, las de Vietnam sobre las islas Paracel, y las que varias naciones del sudeste asiático hacen sobre las islas Spratly. Además, tiene diferencias con Vietnam sobre la demarcación del Golfo de Tonkin y hace reclamaciones territoriales a Rusia, Tadjikistán, India e incluso a Corea del Norte.

Otro gran problema reside en el cortoplazismo y en la concepción demasiado instalada en la cruda lógica de lucha por el poder que inspira a los dirigentes chinos en su política exterior. Aunque China, en términos generales, ha procurado “seguir las reglas del juego”, algunos rasgos significativos dejan ver una tendencia que busca lograr ganancias unilaterales a expensas de la estabilidad regional e internacional. En ese sentido han de ser consideradas las reclamaciones territoriales ya citadas, cuya intensidad se acentúa o disminuye según lo demande la ocasión, y la colaboración de China con el desarrollo militar, el patronazgo, y el sostenimiento conómico de regímenes deleznables en Asia y Africa. China sencillamente es incapaz de asumir plenamente las responsabilidades que implica ser una gran potencia y mantiene una muy trasnochada Realpolitik.

Un último factor de inestabilidad, tal vez el más delicado, lo representan las graves disparidades y contradicciones internas que existen en China y que podrían dar lugar a indeseables pugnas por el poder. En muchos sentidos, este enorme país constituye una paradoja. Siendo en los números una gran potencuiaeconómica y militar Con algunos parámetros presenta indicadores de nación del tercer mundo (sobre todo en las regiomnes mucho menos desarrolladas del interior) , su desarrollo tecnológico tidavía va claramente a la zaga y la población sigue siendo predominantemente rural. Prevalecen graves desequilibrios regionales. El desarrollo económico acelerado es privativo únicamente de algunas regiones, las que han sido consideradas como “zonas económicas especiales”, casi todas ubicadas en la costa, mientras que las provincias del interior mantienen un subdesarrollo impresionante. Estas disparidades ya se han manifestado en el surgimiento de tendencias separatistas y en el soterrado incremento de tensiones sociales y políticas. La modernización económica ha provocado el traslado de aproximadamente 130 millones de chinos del campo a las ciudades, y se calcula que hay otros 200 millones listos para emigrar pronto, lo que sin duda ha creado una potencial situación de cambio político y social profundo. Además, queda el nada despreciable problema de que, a final de cuentas, el régimen sostiene una ideología que está muerta. El Partido Comunista se mantiene en el poder como parte de una inercia y con base a la coerción. Las presiones por democratizar el sistema político podrían crecer en los próximos años, provocar una reacción más o menos enérgica de los ortodoxos e iniciar una etapa de incertidumbre.

Occidente no puede darse el lujo de confrontar abiertamente a China, pero ha llegado la hora de hablarle al dragón un poquito más fuerte y claro y de hacerle ver que en el siglo XXI ser una gran potencia implica el cumplimiento de grandes responsabilidades y compromisos internacionales.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Antiintelectualismo y Política en Estados Unidos


En Estados Unidos (y en muchos países más) ser o parecer un intelectual es un gravísimo defecto para quienes se dedican a la política. Nadie ignora, por ejemplo, que la chabacanería mental de Bush Jr. de mucho le sirvió para derrotar a los "nerds" Gore y Kerry en las elecciones presidenciales de 2000 y 20004. La última expresión de esta derecha antiintelectual es el llamado "Tea Party" que aglutina a buena parte de la oposición más conservadora en contra del presidente Obama y cuya principal característica es un furibundo desprecio por la inteligencia. Basta escuchar las barbaridades que suelen propalar comentaristas de la talla de Limbaugh, Debbs, Hannity y otros muchos por el estilo (los conservative talk shows se cuentan por decenas en todo Estados Unidos) para entender que en el país más poderoso del mundo se desconfía de la inteligencia como atributo de los líderes.
El antiintelectualismo tiene una larga tradición en los Estados Unidos. En 1964 el politólogo Richard Hofstadter ganó el premio Pulitzer con un libro interesantísimo que se llama Anti-Intellectualism in American Life donde exploraba las profundas raíces del rechazo por todo aquel sabiondillo que sabe demasiado. Según Hofstadter, el antiintelectualismo tuvo sus orígenes en características estadounidenses anteriores a la fundación de la Nación: la desconfianza ante la modernización laica, la preferencia por soluciones prácticas a los problemas y, por sobre todas las cosas, la influencia devastadora del evangelismo protestante en la vida cotidiana. También llama mucho la atención la reflexión que hace Hofstadter ante la ironía de que un país que fue creado por intelectuales (la mayoría de los firmantes de la declaración de Independencia lo eran) se deprecie y desconfíe tanto del político que antepone la razón a los sentimientos o a la fe. También subraya algo que es cardinal para entender a todo aquellos que reaccionan en contra de la inteligencia en política. "La mente fundamentalista es esencialmente maniquea; piensa que el mundo es el escenario del conflicto entre el bien absoluto y el mal absoluto y, por lo tanto, desprecia los acuerdos (¿quién pactaría con Satanás?) y no puede tolerar ninguna ambigüedad. No puede dar ninguna importancia a lo que considera meros grados ínfimos de diferencia."
Evidentemente, estas verdades profundas sobre el carácter maniqueo del antiintelectualismo se aplican perfectamente al neoconservadurismo norteamericano pero también a todos los populismos y fundamentalismos de izquierda y de derecha que pululan por aquí y por allá. Ah, por que esto de desconfiar de la inteligencia en absoluto es privativo de la derecha cristiana del Partido Republicano, ¡Qué Bah! Está presente, y de qué forma, en las actitudes de los populistas de izquierda que dividen al mundo en buenos y malos y no admiten ningún tipo de matices que atemperen sus dogmas. Pero al cuestionarse a quienes piensan, al denunciar a aquellos que supuestamente profieren un discurso "para pocos" y que, por consiguiente (dicen) responde a las expectativas y preocupaciones de unos pocos e ignora "las preocupaciones e intereses de las mayorías y el lenguaje que permite hablarle al pueblo" se opta por desterrar a la razón de la tarea de gobernar y los resultados suelen ser absolutamente desastrosos.

martes, 16 de febrero de 2010

Toyota y sus problemas


Los ingentes problemas que enfrenta la empresa automotriz japonesa Toyota han dado lugar a una serie de estupendos chistes en la televisión gringa, seguramente reflejo de una shadenfreude resultado de tantas décadas en las que la industria automotriz estadounidense ha debido tolerar el liderazgo de sus rivales japoneses. He aquí algunas perlas resultado de esta catarsis:

"Over the next two weeks, we're going to have the Winter Olympics... They're doing something this year that is going to add a little more excitement. All the bobsleds are made by Toyota," Jay Leno.

"Critics of the automobile industry are saying that Toyota executives knew about the problems with the brakes years and years ago. And they're wondering, rightly so, why did they drag their feet? Well, trying to stop the car. That's what they were doing," "Things are dangerous, and I'm coming to work in my car. Here's how scary it is. The navigation lady was actually praying," Letterman.

Leído en Twitter: User @evilray posted: "Hey, y'all! Check out my new Toyota keyboaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa..."

"Toyota has issued a recall of 8.1 million vehicles whose faulty gas pedals could cause them to accelerate out of control. In their defense Toyota's slogan is "Moving Forward" -- they don't say anything in there about stopping," The Colbert Report.

jueves, 11 de febrero de 2010

"Don César"


No cabe duda que el Secretario de Gobernación se aventó una fina ironía al presentar su renuncia al PAN. ¿Se imaginan al pobre de César Nava como un "Don" con esta cara de pendejazo que tiene?

Por cierto, estuve leyendo ayer algunas reacciones a botepronto de nuestros opinadores sobre la renuncia en Twitter y Facebook. ¡Verdadermente lamentables la inmensa mayoría de ellas! ¡Qué superficiales, cursis y, en ocasiones, naifs son! El peor es el junior de Krauze, un sujeto que poco tiene que aportar más allá de su apellido, porque de "León" tiene muy poco. Habrá que decirle "Don León".

miércoles, 10 de febrero de 2010

Zapatético


Zapatético, el incompetente y desatinado gobernante de España, llegó esta semana a la sima de su popularidad. Vive una autentica pesadilla y el hombre nada más no sabe como salir de ella. La improvisación y la incapacidad de ver cara a cara las dificultades para enfrentarlas han sido las características fundamentales de su desgobierno. Primero creyó que la burbuja española era eterna y no tomó medidas de prevención cuya urgencia le fue advertida en su oportunidad por infinidad de observadores; luego negó a pies juntillas que hubiera crisis; más tarde acusó de la misma a los norteamericanos; después apeló al recursillo populista de inyectar dinero público a mansalva, y finalmente, con la soga al cuello, pensó que a España la iba a sacar adelante Francia y Alemania en el momento en que las locomotoras europeas volvieran a crecer, cosa que no ha pasado y no tiene visos de ocurrir en el corto plazo. Y a todo esto habrá que sumar que el país va que vuela a los 5 millones de desempleados.

El colmo lo tuvimos hace poco cuando ZP asistió como invitado de honor a Washington al Desayuno Nacional de Oración. Me llaman la atención todos esos progres mexicanos que con justificadísima razón ponen el grito en el cielo cuando Calderón o alguna de nuestras zafias y mojigatas autoridades le hacen el juego a la Iglesia Católica ahora se hayan felicitado "de lo bonito que habló Zapatero ante Obama los cristianos gringos". Pero lo peor es que el papelito no le valió de nada, no se revirtió el desaire que le ha hecho Obama a la cada vez más irrelevante Europa al negarse a celebrar una cumbre en Madrid. El pobre de Zapatético contaba con sacar mucho provecho de la presidencia española de la UE, pero las cosas se le han revertido al presidente del gobierno español, convertido en hazmerreir del viejo continente. El ridículo alcanzó su máxima cota en la reciente conferencia económica de Davos, donde el muy bruto ZP no tuvo ocurrencia mejor que aparecer en un panel al lado del griego Papandreou y del letón Zatlers, con lo que terminó por meter a España en el club de los enfermos graves de Europa, poniéndole en la lupa de mercados financieros y analistas como firme candidato a entrar en una situación de insostenibilidad de sus finanzas públicas.

Zapatero no tiene posibilidad alguna de reelegirse para un tercer mandato, y eso que la oposición representada por Marianito Rajoy y la alocada derecha española no es mucho mejor. Va llegando la hora de que ZP y el PSOE empiecen a preparar un relevo que logre salvar a España de las garras del PP.

sábado, 6 de febrero de 2010

Sueños


"Me indigna el apasionamiento que ponen ciertas personas en desdeñar tercamente los hechos en beneficio de las hipótesis y en no reconocer sus sueños como lo que son: sólo sueños"*


*de Memorias de Adriano