miércoles, 13 de febrero de 2008

"Intelectuales" hipócritas


Es una pena ver como algunos de nuestros pseudo intelectuales siguen chillando como plañideras que la reforma electoral prohiba la compra de espacios publicitarios durante las campañas electorales por parte de partidos candidatos y grupos de poder. ¡Son unos Hipócritas!


Hay que reiterarlo una y mil veces: es completamente falso que la ley limite la libertad de expesión. Quienes extrañen la política como lucha en el lodo van a poder ver toneladas de videos denigratorios en You Tube durante las campañas electorales mexicanas, en virtud a que es un medio no regulado. La ley no coarta la libertad de expresión de los ciudadanos. Todos -ciudadanos de a pie y opinadores profesionales- vamos a poder decir y publicar lo que nos venga en gana. Se prohibe, exlusivamente, la compra de espacios comerciales en radio y TV. Sí, esos que se adquiren con el dinero interesado de los grupos de poder y de millonarios como Kamel Nacif. ¡Ahhhh, pero como nos indigna luego que los gobernadores les hagan "favorcitos" a los miserables que los patrocinan! ¿verdad? ¡Cómo nos hemos desgarrado las vestiduras con el asunto del gober precioso! ¡O con el ridículo que hizo el pendejo de Gamboa! Pero, ¿sabrán todos esos pseudo intelectuales hipócritas que tanto lamentan el fin de los spots en campaña (y que, al mismo tiempo, son los primeros en deplorar el asunto Marín-Nacif) cuanto dinero aportó esté último para que el precioso pudiera aparecer en la tele con sus mensajitos de campaña?


Si Chucho, vamos a poder ver videos en You Tube como ese que pones en tu blog, que distorsiona de manera burda la imagen de John McCain y lo presenta como lo que no es, y vamos a poder ver anuncitos cursis y superfiales como el que ya le dio un Grammy a Obama. Yes we can! Yes We can! ¡Ah, pero si esto de la política debe ser un show! ¡Un circo con luchas en lodo incluidas! Insisto, amigo, ¿Tanto leer a Sartori para esto?

3 comentarios:

Jshm dijo...

Pedro, tus signos de admiración y tus comillas te ofuscan. El tema en cuestión no es la compra privada de espacios publictarios en los medios electrónicos. El tema es la ridícula prohibición constitucional de emprender campañas negativas. Ése es el punto--por lo menos, el que yo discuto. Aberrante paternalismo que regula lo que no debemos escuchar porque es, como dices como pudorosa señorita, "lodo."
Se ha establecido una aduana que a mí no me gusta. Hay cosas que podrán circular libremente--otras que no.
No se necesita leer mucho a Sartori para sentirse indignado con ese guardián de las buenas costumbres, la decencia y el recato cívico que celebras. Un párrafo de J. S. Mill basta.
Me encanta, como te decía por otro lado, que confíes que la nueva normativa va a elevar la calidad de la política mexicana y que va a cancelar la demagogia de los berlusconis y los roves. Proliferarán en estas tierras los grandes estadistas que dirán puras lindezas y detallarán sus programas e iniciativas sin ofender sus honorables adversarios. Te vuelvo a preguntar, Pedro, ¿qué queda de la retórica churchilliana sin la gracia y la punzada de sus insultos?

Pedro Aguirre dijo...

La pregunta axial que debemos plantearnos al abordar este tema de las campañas negativas es: ¿Está la democracia ante una crisis de represntitividad y de legitimidad? Si respondemos que no, que nuestras democracias gozan, en general, de cabal salud, entonces adelante con las campañas negativas, que en nada afectan, pero si la respuesta es sí, si consideramos que nuestras democtacias -algunas más que otras-se están desprestigiando, pierden día a día legitimidad y estamos ante una crisis de representatividad democrática, entonces es válido tratar de detectar en donde están los problemas.

Yo soy de los que piensan que las democracias se están deteriodando, que declina su calidad y que una causa -no la única- de esto son los abusos en las campañas negativas. No sé si la nueva legislación mexicana es la respusta ideal al respecto, pero por lo menos es una idea. Debemos hacer algo.

Gracias por tu respuesta. Voy a poner al rato un post sobre "The Wit and Wisdom of Winston Churchill".

Anónimo dijo...

Pedro entonces que se cancele la libertad hasta nuevo aviso, y el día que todos los ciudadanos tengan una noción básica de la buena democracia, que se abran elecciones. Lo que se puede ver en la Internet y que ahora defiendes, no lo podrá ver toda la gente. Pretender que ese tiempo en tele que tienen los partidos lo van a llenar con ideas y proyectos, es pensar que se tiene otros partidos, además es mañoso que los mañosos traigan el cuento de que se cansaron de sus mañas y que para evitarlas en el futuro se cierra el derecho a que se les recuerde durante la campaña que son mañosos. Y no me atrevería a creer que una de las causas del desprestigio de la democracia son las campañas negativas, fue lamentable lo que se hizo la elección pasada, pero AMLO pudo contestar y no lo hizo, no por estadista y bien portado si no porque no supo como hacerlo, después de la lenta reacción vino el lamento. Que por otro lado capitalizó en un número de votos que hoy no tiene. Creer pues que televisión de calidad y campañas de calidad se traduce en votos de calidad me parece falso.